Trucos para tener un buen feng shui en tu casa
El feng shui es una antigua disciplina China que se define como el arte de armonizar el espacio para aumentar y favorecer el bienestar de las personas que lo habitan, así como la armonía de cada rincón.
Este arte, que significa “viento” (feng) y “agua” (shui) es perfectamente aplicable en los hogares, y detalles como la orientación de un mueble o los colores pueden influir en la armonía de tu casa y, por tanto, en lo bien que puedas estar en ella. Par algunas personas esto no tiene importancia y creen que el feng shui es una superstición, pero lo cierto es que se basa en el estudio de las leyes de la naturaleza.
Así las cosas, queremos darte algunos consejos para lograr el equilibrio y la armonía en tu hogar, tanto si crees en ello como si no, por si te animas a ponerlo en práctica y ver si tus sensaciones al estar en casa mejoran.
COLOR: Cada espacio de tu casa necesita un color distinto según las teorías del feng shui. Por ejemplo, el amarillo favorece la digestión y da energía, por lo que se aconseja para la cocina, mientras que para los baños se aconsejan tonos fríos, ya que son refrescantes y relajantes. En el dormitorio debemos relajarnos, por lo que azules y verdes son ideales, y el beige es perfecto para una sala de estudio, pues favorece la actividad intelectual.
BAÑO: Para el Feng Shui el agua simboliza el dinero, por lo que no puede estar frente a las puertas de la casa porque podría significar que el dinero se irá por la puerta. El inodoro tiene efectos negativos al representar el desagüe, por lo que se aconseja que esté detrás de la puerta o en un lugar no muy visible. En todo caso, mantener la tapa del inodoro cerrada es fundamental para minimizar esa negatividad que representa el desagüe. Los espejos aportan energía positiva, por lo que cuanto más grandes, mejor.
COCINA: Se prefieren las cocinas de gas, porque el Feng Shui cree que las eléctricas destruyen las energías de los alimentos. La cocina debe estar en la pared que da al sur y lo más iluminada posible.
SALÓN/COMEDOR: Las mesas con bordes redondeados favorecen la comunicación entre los comensales. Dichas mesas de comedor deben estar colocadas lo más cerca de la puerta de la cocina posible. La puerta de entrada no debe estar de espaldas al sofá.
DORMITORIO: Evitar estampados y colores estridentes en paredes y textiles del dormitorio, pues pueden influir en nuestro menor descanso, al igual que los aparatos electrónicos cerca de la cama. La cama debe estar apoyada a alguna pared para ofrecer protección, y mejor si tiene cabecero. Las plantas no son buenas compañeras en el dormitorio porque producen un exceso de energía que no ayuda a descansar.
¿Qué te parecen estos consejos? ¿Crees que tu casa cumple las normas del Feng Shui?